martes, 14 de abril de 2015

El Parque de las Esculturas

El Parque de las Esculturas pertenece a la comuna de Providencia, se encuentra ubicado en la ribera norte del río Mapocho, por avenida Santa María, entre Pedro de Valdivia y calle Nueva de Lyon. Aunque rodeado de edificios este lugar resulta ser muy llamativo, pues se trata de uno de los mejores espacios verdes para disfrutar de la ciudad y también de un museo al aire libre. Este parque, además de esculturas, posee numerosas plantas de diversas regiones, por lo que resulta ser una especie de jardín botánico. 

Nació como una alternativa para ocupar una zona que había sido destruida el año 1982 por una inundación del río Mapocho, porque el agua hizo desaparecer por completo los jardines que se encontraban en el lugar. En ese momento existía la Corporación Cultural Providencia, quienes junto a artistas, vecinos y autoridades planearon usar el espacio, para crear un museo al aire libre, el cual tenía como propósito acercar la cultura a cada uno de los ciudadanos gratuitamente.

Se construyó bajo los diseños del arquitecto Germán Bannen y del paisajista Jorge Oyarzún y fue inaugurado el 17 de diciembre de 1986, siendo considerado como el primero en su género en Chile y en America Latina. Se inició con la primera escultura de nombre ''Pachamama'' que corresponde a un tributo a la madre tierra de Marta Colvín. 

Actualmente, el parque ofrece una muestra de más de 30 esculturas de diversos tamaños y estilos, pertenecientes a destacados artistas chilenos como Sergio Castillo, Juan Egenau y Federico Assler, que usando diversos materiales logran mostrarnos sus visiones particulares del mundo. Existen unas obras que logran robarse la mirada de todos, se trata de la escultura ''Semillas'', consiste en 3 figuras de fierro de color amarillas que simulan frutos de trigo, al igual que la novedosa aguja con un hilo de singular tamaño. Cuenta con una sala de exposiciones, en donde se realizan constantemente muestras de jóvenes talentos nacionales. Incluso se realizan presentaciones y eventos musicales, como el Festival Internacional Providencia Jazz, que durante el mes de enero reúne a importantes exponentes de este estilo musical y tiene una gran acogida entre los habitantes de Santiago.

Las personas que lo visitan pueden gozar de la tranquilad, tendiéndose en el pasto, ya sea para hacer un picnic o para conversar con sus amigos luego de una agotadora jornada. También entrega la perfecta instancia para salir a pasear con las mascotas, hacer deporte o simplemente caminar por la ribera del río Mapocho contemplando arte.

¿Qué estás esperando? Abandona el estrés que provoca la ciudad con su rutina y ven a conocer este maravilloso lugar en el centro de Providencia, a pocos metros del cerro San Cristóbal y el Mall Costanera Center. Acá nadie te molestara y podrás disfrutar de una hermosa vista, de la arquitectura urbana, el arte, la música y la cultura en el Parque de las Esculturas.



lunes, 6 de abril de 2015

La chica de la sonrisa

Hoy es lunes, un día en particular en donde todos se miran las caras, es algo incómodo y no lo hacen de una manera disimulada, puedo sentir que alguien me escogió o tal vez solo es un presentimiento, debe ser eso. El propósito de esto es seleccionar a una persona, no a cualquier persona, una a la cual no consideremos nuestro amigo, parece una tarea complicada, empiezo a mirar cada uno de mis compañeros, muchos rostros, los cuales veo prácticamente todos los días, descarto a mis amigas y la elegida es ella, su nombre es Selena Arredondo,  la chica que canta lindo, además la que tiene un tono de voz bajo, la conozco desde primero medio, pese a ello han sido pocas las veces en donde tengo la oportunidad de hablarle, bastante escasas, casi ni suceden, por lo mismo apenas la conozco.

Ella es de mediana estatura, su tez es blanca, su cabello es de un color claro, que llega más abajo de los hombros, tiene unos ojos pequeños y una hermosa sonrisa. En las oportunidades que tengo de verla, la mayoría de las veces siempre la veo reír, por eso la encuentro una persona simpática, aunque tímida, también callada, ya que su presencia ni se nota en la sala de clases, porque es muy tranquila. Me parece una persona bastante agradable y eso que no tengo con ella una relación muy cercana, pues es como si nos encontráramos en distintos mundos, en un extremo de la sala ella vive su mundo y yo el mío, siendo que estamos en la misma sala de clases.


A veces la saludo por las mañanas o sucede al revés y eso es todo. Ni existe un intercambio de palabras y así transcurre toda la semana. Nunca se presenta la ocasión para acercarme a ella y comenzar a hablarle, nunca le puedo preguntar cómo se encuentra o como le ha ido. Ojala fuera más cercana a ella, porque es el último año y me encantaría llevarme el recuerdo de buenas personas con las cuales terminé la educación media. No quiero que cuando sea tarde pensar en lo distinto que serían las cosas, si tan solo hubiera dedicado algo de tiempo en conocer bien a mis compañeras.


De lunes a viernes las dos compartimos con distintas personas siempre y finalmente esto resulta ser una verdadera rutina. Es difícil  ir donde  ella, porque siempre está acompañada y al momento de ir me surgen un montón de  dudas y no sé si será de su agrado mi presencia o mi llegada será en un buen momento, entonces prefiero no hacerlo, ya que somos dos personas muy distintas, quizás ese sea el motivo de que no seamos muy cercanas. También encuentro que de parte de las dos no ha existido un interés por la otra.


Me gustaría algún día dedicarme en un recreo a solo hablarle y desligarnos de las personas con las que siempre solemos juntarnos, puesto que sería genial conocernos mejor. Con el objetivo de conseguir una relación más cercana, dado que me parece una grandiosa persona, pues son sus palabras las que encuentro que la hacen ser única, me he dado cuenta de esa capacidad que posee cuando suele opinar en alguna clase, algo que hace a lo lejos, pese a ello es una persona a la cual admiro.